miércoles, 19 de diciembre de 2012

Legendarium de Tolkien

Legendarium es un término puramente tolkendili, ecúmene para los griegos. Es un término que usado para designar el conjunto de tierras conocidas por una cultura pero que para el caso de Tolkien se usa de manera que engloba todos los textos literarios que hablan sobre una mitología concreta o, más específicamente para este autor, sobre la Tierra Media.



J.R.R. Tolkien tenía la intención de dotar una mitología propia a su mundo anglosajón y bebió de numerosas fuentes entre las que destacar la escandinava pero aportó elementos de cosecha propia como fueron los hobbits o su conocida afición filológica como la de crear e inventarse lenguas fantásticas. Esta extensa y laboriosa obra que inició con la publicación de El Hobbit y la trilogía de El Señor de los Anillos (además de algunos poemas) quedó inacabada a su muerte y parcialmente completada con la publicación de los escritos de El Silmarillion y Los Hijos de Hûrin (además de multitud de cartas, y otros libros de ensayo) gracias a su hijo Christopher Tolkien. Pero en mi opinión estas pinceladas sobre la historia de Arda y el subcontinente de la Tierra Media no pudieron ser más acertadas pues dejó numerosos vacíos que no hacen sino engrandecer el mundo que describió: ¿Qué pasó con los magos azules? ¿Eran malvados todos los hombres al sur y este de la Tierra Media o también hubo movimientos de resistencia como en el oeste? ¿Y los enanos? ¿Qué fue de ellos? ¿Y los elfos? ¿No había en otro lugar? ¿Todos marcharon hacia las Tierras Imperecederas?

Cada fan de la Tierra Media tiene su propia Tierra Media, como él la ha construido, con sus misterios y sus elucubraciones. Cada nueva información que conseguimos de este mundo la atesoramos, como si fuéramos exploradores en terreno ignoto; la genialidad de esta obra no reside en la historia en sí, sino en la fascinación que me ha supuesto desde mi infancia, hubo obras de fantasía antes de El Señor de los Anillos y las ha habido después, pero ninguna con la ambición de ésta. 

No hablo de Tolkien y su legendarium tan a menudo de lo que querría (y la mitad de lo que yo querría es menos de lo que la mitad querríais), pero me pasaría tardes enteras maravillado entre estas fantasías. Así que habla, amigo, y entra, que estoy siempre dispuesto a ello, desde los salones de Khazad-Dûm hasta las terribles planicies de Mordor pasando por los bosques de Beleriand o las Montañas de Nubladas.

Entrada dedicada a @CristinaRFV, @Menelwencilla y @Manduaper. Por compartir la afición "tolkendili".

1 comentario:

  1. Me ha gustado mucho: la entrada y que nos la dediques :) Algún día te enseñaré algunos libros que tengo que se dedican a responder preguntas como las que te has planteado, y son bastante curiosos. ("¿Tienen alas los Balrogs"?)

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